A continuación reproduzco un reportaje publicado en el sitio de Jodorowsky, y que me hizo mucho sentido, relacionandola con el mundo del diseño, desde su visión de los cuentos:
Alejandro Jodorowsky presentando un libro en Madrid no es cosa de todos los días. En París hay quienes pueden asistir libremente a las sesiones de psicomagia y lectura del tarot que celebra casi a diario y de manera gratuita en un céntrico Café.
Pero aquí no.
Por eso, la Casa de América elaboró un programa doble que incluía una sesión nocturna para no iniciados donde, más allá de hablar de las historias que componen El tesoro de la sombra, el cineasta y escritor chileno atendió consultas varias, ofreciendo imaginativos remedios a modo de actos de psicomagia destinados "a curar los bloqueos sexuales, afectivos y creativos" del paciente; además de una rueda de prensa a mediodía, donde una treintena de periodistas se amontona en las sillas del Salón Bolivar y sonríe cómplice sus bromas mientras toma nota compulsivamente de las grageas de experiencia vital que Jodorowsky no puede dejar de colar en cada respuesta. "Ya me lo ha dicho mi esposa:
Alejandro cada vez que hablamos pareciera que me estás dando lecciones" cuenta divertido. Así, Alejandro empieza por una teoría del cuento: "Nuestra sociedad está basada en cuentos. La Biblia es un cuento o una recopilación de cuentos. Ya es otra cosa si crees en ellos o no" o "Los cuentos cortos no son sino un conducirte al presente mismo, resultan o no", para continuar con una explicación del fenómeno de la prensa rosa: "Como ya no tenemos héroes ni personajes míticos, de ahí que la gente sienta fascinación por las revistas del corazón, las estrellas del cine y la televisión, por cómo cogen y cómo comen".
Jodorowsky hace gala de un dominio de escena formado en sus años de teatro experimental en la Universidad de Chile y la escuela de mimos de Marcel Marceau. Habla con una voz segura, pausada y casi musical, plagada de modismos chilenos que media vida viviendo en Europa no ha conseguido desterrar, mientras mueve las manos con ligereza para ilustrar anécdotas y enfatizar máximas y aforismos. Jodorowsky habla y escribe en greguerías (este último libro de cuentos cortos -casi 200- es muestra de ello). "No, no soy devoto de Gómez de la Serna, la greguería es todo un género a nivel mundial, pero aquí en España son muy dados a preferir el producto nacional" dice con una sonrisa. La charla torna, como bien dice su esposa, en lecciones para los oyentes cautivados por el psicomago:
"El milagro está en todas partes, sólo hay que verlo"
"Lo racional, como el psicoanálisis, es una adquisición maravillosa, no hay que apartarnos de ello sino expandirlo".
"Cuando estudiaba filosofía me molestaba mucho que los intelectuales sólo tuviera ojos para lo intelectual, dejando de lado los sentimientos y la creatividad".
"Ya pasó la hegemonía del intelecto, en la universidad debe estudiarse los sentimientos y la creatividad, sobretodo la creatividad".
"Siempre que existe un conflicto entre la razón y la intuición hay que dejarse guiar por la intuición, la intuición es mucho más sabia que la razón."
"No podemos cambiar el mundo, pero podemos empezar a cambiarlo. En este mundo imperfecto existen islas de perfección, hay que buscarlas, coleccionarlas como collares"
Cuando se le pregunta sobre la naturaleza de sus remedios psicomágicos, sobre qué es lo que le hace creer que cierto acto será la cura adecuada para el problema expuesto, resuella un poco, "ahhhh" y responde distinguiendo y mirando a los ojos de su interlocutor: "Entro en trance, veo el problema y hago arte. Cada terapia es una obra de arte, por eso no cobro, si cobrase tendrían que pagarme como se paga un cuadro de Picasso".
Para terminar cuenta en exclusiva sus dos próximos proyectos: Un libro de magia para niños y una película. "Para el libro me ha convencido ella" y mira a su editora, "me comentó la idea y me encantó, así que hemos firmado el contrato y no me queda otra que cumplir". La película lleva por nombre King Shot. "Todo surgió en el Festival de Cine Latinoamericano de Los Ángeles, pasaron Santa Sangre y yo miraba sorprendido la sala abarrotada y oía los aplausos del público. Luego se me acercaron Nick Nolte y Daryl Hannah para pedirme que hiciese otra película. Entonces manos a la obra. Contaré también con Santiago Segura, vi Torrente y me encantó así que un día le llamé: 'Soy Jodorowsky, ¿me conoces?' 'Claro, claro' 'Bueno, voy a hacer una película y me gustaría que participases en ella' 'Ajá' 'Pero no tengo dinero' 'No importa, lo hago gratis' 'Tu personaje es calvo' 'Yo soy calvo, vale, mándame el script' y al parecer le gustó. Empezamos a rodar en Abril, también estará Marilyn Manson, quien anda diciendo por ahí que se inspiró en mi para algunos de sus videos y me invitó a un festival de música que él organiza, donde me mostró un álbum repleto de recortes de mis películas, así que le he pedido que aparezca en el filme y aceptó encantado".